Aragón Existe propone que los comercios de pequeñas poblaciones sean considerados entidades de economía social

La propuesta, aprobada en el Congreso de los Diputados a instancias de Teruel Existe, permite que estos establecimientos se acojan a beneficios fiscales si están situados en localidades de menos de 200 habitantes

 

“Son algo más que un comercio, se trata de auténticos centros sociales sobre los que gira la vida del pueblo”. Así califica Juanjo Granadero, candidato al Congreso por Zaragoza, a los bares, tiendas y comercios de los pueblos más pequeños. Aragón Existe quiere que su reconocimiento como entidades sociales llegue lo antes posible, gracias a la proposición de ley de Teruel Existe para modificar la Ley de Economía Social. La propuesta, que se aplicará a los pueblos de menos de 200 habitantes, fue presentada el pasado mes de marzo y obtuvo una amplísima mayoría en el Congreso de los Diputados.

Granadero, que ha visitado hoy la zona de la laguna de Gallocanta, ha conocido de primera mano el impacto que los bares y tiendas pueden tener en un pueblo con pocos habitantes. “Son un punto de encuentro que es importante mantener, los vecinos tienen aquí el lugar donde charlar, especialmente los más mayores, pasar el rato y hacer vida social. Sin ellos, muchos se quedarían en su casa”. 

En otros lugares, dice Granadero, estar con más gente puede parecer algo cotidiano, pero en los pueblos pequeños la importancia de bares y tiendas se multiplica, ya que “sirven para combatir la soledad, favorecer la salud cognitiva y mental, por lo que se puede conseguir un gran beneficio sanitario y de prevención”. 

El candidato al Congreso ha visitado la tienda multiservicio de Gallocanta, que gestiona la misma familia que regenta el bar, de propiedad municipal. El gerente, que lleva poco tiempo al frente del negocio, ha destacado que “en estos meses de verano se incrementa la faena, pero el invierno puede hacerse muy largo”. Por eso ha valorado muy positivamente que el reconocimiento como entidad social pueda mejorar la rentabilidad del negocio.

De la misma opinión se ha mostrado Javier Mañas, alcalde del municipio y propietario del Albergue Allucant. “En un lugar como éste los servicios que prestamos son muy importantes, no solo para el pueblo sino también para los visitantes. Aquí no estamos al mismo nivel que en una ciudad, porque la rentabilidad no es la misma, pero aportamos mucho a la vida de los pueblos”. 

 

RESPALDO CASI UNÁNIME EN EL CONGRESO

La proposición de ley obtuvo en marzo el voto afirmativo de casi todo el arco parlamentario, una situación prácticamente inédita durante la pasada legislatura. Entonces el diputado Tomás Guitarte expuso que los bares y pequeños comercios “son un servicio social que debe reconocerse por ley, porque son espacios de convivencia y cumplen una importante función de socialización”.

“La compañía es un factor que aporta calidad de vida y si carecemos de ella, el poblamiento y la actividad económica son mucho más difíciles, cuando no imposibles”. La proposición de ley sostiene que debe reconocerse la función de estos negocios, porque contribuyen a la cohesión social y proveen de servicios básicos que, de otra manera, estarían fuera del alcance de los vecinos. Así, la propuesta señala que las ayudas a estos negocios deben llegar “mediante incentivos de distinto tipo, fiscales y otros, para que logren la rentabilidad y puedan ser sostenibles en el tiempo”.